¡Cómo nos gustará complicarnos tanto la vida con tanta palabreja…para nombrar algo que siempre ha existido! Si encima la palabreja es en inglés… ¡ya ni os contamos!  Hoy la palabreja es en castellano, “gastrosexuales”.

Hace unos años se acuñó el término de metrosexuales para definir a los chicos preocupados y cuidadosos de  su físico. Tras estos términos han venido muchos más, entre ellos el de “fofisanos”, el de “übersexuales”el de” lumbersexuales”… un montón de terminología nueva para nombrar cosas sencillas y de toda la vida pero parece que así le damos más renombre y lo reactualizamos y ponemos de moda. Valga para el ejemplo las tradicionales magdalenas, que ya se habían rellenado de mermelada y de chocolate y de repente se llaman muffins y ya…son la leche, y pagamos por cada una un euro y bastante cuando por un paquete de magdalenas se pagan 2 y vienen 12.

Pero bueno, nos gusta liarnos la manta a la cabeza, ir de modernos, y decir lo de siempre de otra forma. Así pues a los chicos cocinillas de toda la vida… si ahora quieres ser moderno les tienes que llamar “gastrosexuales”, claro que para llamarles asi tendrás, claro está,  que memorizar la palabrita.

Y le han añadido “sexuales” porque se supone que son chicos que tratan de llegar al corazoncito de su chica a través del estómago. Qué curioso ¿verdad? Antes se decían cosas así de las chicas, que al hombre se le ganaba por el estómago,…y ahora parece que ellos hacen eco de este mítico dicho y se apuntan a cocinar.

Y se le añade el detallazo de tener todo preparadísimo para cuando llegue ella, la mesa estupendamente preparada, con mimo y detalle, la comida a punto para ser servida…

Y es que la masculinidad al igual que la feminidad está en proceso y esperemos que en progreso, ya que siempre no van parejos.